En graves condiciones Luca Abbà, líder histórico del movimiento NO TAV
por Annalisa Melandri
Valle de Susa, Italia. Durante una expropiación de terrenos para la ampliación del túnel TAV Luca Abbà quien se había subido en una torre de alta tensión cae desde 10 metros de altura. Sus condiciones son muy graves.
La protesta contra la línea de trenes de alta velocidad (TAV) en Italia recrudece frente a las expropiaciones manu militari de las tierras necesarias para la ampliación del túnel a Chiomonte en el Valle de Susa (Turín) en el noroeste del país.
Lamentablemente con la protesta recrudece también la represión violenta de las fuerzas represivas del Estado en su tarea de defender los intereses económicos que están detrás de la realización de la obra.
El sábado 25 de febrero, una manifestación pacífica de casi 70 mil activistas llegados de toda Italia invade el valle. Hombres y mujeres, niños y ancianos decididos a defender su territorio. Los familiares de los más de veinte detenidos del mes pasado. Pero no solamente simples ciudadan@s sino también varios partidos políticos de la heterogénea galaxia de la izquierda italiana, asociaciones de comerciantes, sindicatos y alcaldes de pequeños y grandes municipio recorren marchando juntos la distancia entre Bussoleno y Susa. 6 kilómetros y medio de personas que gritan con una sola voz, una vez más, a un gobierno sordo ¡NO TAV!
La importante y participada convocatoria se había dado por la noticia que el martes sucesivo era el día establecido por las fuerzas del orden para las expropiaciones de los terrenos necesarios a la ampliación del túnel, empezando por el desalojo del Chalet Clarea, símbolo de la resistencia NO Tav en Val Susa, situada en el “área de interés estratégico nacional” como ha sido definida toda esta zona por el Comité interministerial por la programación económica.
Ayer lunes, en la mañana, la tragedia. Luca Abbà de 37 años, uno de los líderes históricos del movimiento NO TAV y propietario de un terreno que le iban a expropiar, se sube en una torre de alta tensión con el intento de ganar más tiempo en el desalojo y permitir a más activistas de llegar hasta el Chalet. Desde allá encima estaba comunicándose por un reportaje en directa con una emisora de Turín. Había interrumpido la conexión porque un policía se estaba subiendo en la misma torre con la intención de apresarlo. Probablemente una distracción o el intento de subir más para no ser alcanzado por el policía y toca un cable de alta tensión quedando electrocutado. Cae desde 10 metros de alturas. Sus condiciones son gravísimas, fracturas a el esternón y costillas, trauma craneano y graves quemaduras. Lo llevan en helicóptero hasta el hospital de Turín donde es todavía interno en observación constante.
Mientras tanto siguen las operaciones de cercado de los terrenos no obstante la petición de la suspensión de las mismas por el incidente ocurrido. Explota la rabia e la indignación en toda Italia.
Manifestantes ocupan las autopistas hacia el Valle de Susa y la Francia, estaciones de trenes en diferentes ciudades (en Turín se dan violentos enfrentamientos entre la policía y los activistas) y piquetes se organizan contemporáneamente en diferentes ciudades italianas mientras un grupo de técnicos y juristas solidarios con la causa NO TAV objetan la legitimidad de las expropiaciones considerándolas abusivas. También el grupo Anonymous solidariza con la protesta NO TAV y hackea la página web de la policía dejándola offline.
El último informe médico sobre las condiciones de Luca Abbà nos alienta un poco: hay buenas posibilidades que las lesiones internas puedan reabsorberse y hay un 60% de probabilidad que su vida vuelva como antes en las próximas semanas, pero no es fuera de peligro.
El valle necesita Luca vivo y más fuerte que nunca. ¿Necesita muertos el Estado italiano para entender que el pueblo no quiere esta obra dañina, costosa e inútil?
¿No son suficientes casi veinte años de lucha organizada?
!Estado asesino!